El depósito de recuperación de refrigerante es el depósito de almacenamiento y suministro del refrigerante del motor. Por lo general, se encuentra en la bahía del motor, cerca del radiador. Se requiere un depósito de recuperación de refrigerante porque los sistemas de refrigeración automotriz pasan por ciclos de expulsión y absorción de refrigerante a través de su funcionamiento normal. Cuando el motor está frío, la presión es baja y requiere más refrigerante; cuando está caliente, el refrigerante se expande y se requiere menos.
Una tapa presurizada permite que el exceso de refrigerante se purgue en el depósito cuando la presión ha alcanzado un cierto umbral. Para algunos vehículos, el depósito de recuperación de refrigerante también forma parte del sistema presurizado y actúa como una importante cámara de compensación de presión para el sistema de refrigeración del motor. Debido a que es un componente importante del sistema de enfriamiento del vehículo, cuando el depósito de recuperación de refrigerante tiene problemas, puede ocasionar rápidamente problemas que pueden dañar el motor. Por lo general, un depósito problemático de recuperación de refrigerante mostrará algunos síntomas que pueden alertar al conductor de que se ha producido un problema potencial y que debe recibir servicio.
1. Constantemente tener que agregar refrigerante
Tener que agregar constantemente refrigerante a un vehículo es uno de los primeros síntomas de un problema con un depósito de recuperación de refrigerante. Si el depósito de refrigerante tiene pequeñas fugas, puede causar que el refrigerante gotee o se evapore a un ritmo lento que no será fácilmente perceptible para el conductor. El refrigerante tendrá que agregarse constantemente al vehículo cada cierto tiempo. Este problema también puede ser causado por una fuga en otro lugar en el sistema de enfriamiento, por lo que se recomienda un diagnóstico adecuado.
2. Fugas de refrigerante visibles
Otro síntoma comúnmente asociado con un depósito de recuperación de refrigerante malo o defectuoso es la fuga de refrigerante. Si el depósito de recuperación de refrigerante se daña o desarrolla grietas, tal vez debido a la vejez o al refrigerante en ebullición, causará fugas de refrigerante. Pequeñas fugas o grietas pueden producir vapor, goteos y un débil olor a refrigerante, mientras que fugas grandes pueden producir charcos y un obvio olor a refrigerante. Cualquier fuga de refrigerante debe abordarse lo antes posible para evitar el sobrecalentamiento.
3. Sobrecalentamiento del motor
El sobrecalentamiento del motor es otro síntoma de un posible problema con el depósito de recuperación de refrigerante. Si el depósito tiene fugas y el nivel de refrigerante cae demasiado bajo, puede provocar el sobrecalentamiento del motor, dependiendo del tamaño de la fuga. Para los vehículos donde el depósito es parte del sistema de refrigerante presurizado, si el depósito tiene algún problema, puede alterar la presión del sistema de enfriamiento, lo que también puede causar sobrecalentamiento.
El depósito de recuperación de refrigerante es un componente importante para cualquier vehículo, ya que es parte del sistema de enfriamiento del motor, que protege el motor del sobrecalentamiento. Por esta razón, si sospecha que su depósito de recuperación de refrigerante puede tener un problema, haga que un técnico profesional diagnostique el vehículo correctamente, como uno de Vermin-Club, para determinar si es necesario reemplazar el depósito de recuperación de refrigerante.