Indiana tiene leyes que ordenan la protección de los niños cuando viajan en vehículos motorizados. Estas leyes se basan en el sentido común: los niños de ciertas edades no son seguros cuando usan cinturones de seguridad para adultos que no están diseñados para adaptarse a sus proporciones, por lo que es necesario usar un asiento para el automóvil.
Resumen de las leyes de asientos de automóviles de Indiana
Las leyes de seguridad de los asientos infantiles de Indiana se pueden resumir de la siguiente manera.
Niños hasta la edad de uno
- Los niños desde el nacimiento y hasta la edad de 1 o 20 libras deben ser transportados en un asiento para bebés mirando hacia atrás, o un asiento convertible en la posición orientada hacia atrás. Esto apoya la espalda, la cabeza y el cuello del niño en caso de una colisión.
Niños de 1 a 8 años
- Los niños que tienen entre 1 y 8 años de edad deben viajar en un asiento elevador, un asiento para el automóvil orientado hacia adelante o un asiento convertible orientado hacia adelante.
Niños de 8 a 16 años
- Un niño entre las edades de 8 y 16 debe viajar en un asiento elevado si es menor de 40 libras, pero puede usar el cinturón de seguridad si pesa más de 40 libras. Un asiento elevado es más apropiado para niños de cuatro pies, nueve pulgadas o menos.
Niños de más de cuatro pies, nueve pulgadas
- Un niño de más de cuatro pies y nueve pulgadas puede viajar en el asiento trasero usando solo un cinturón de regazo. Los niños de más de cuatro pies y nueve pulgadas deben usar cinturones de seguridad para adultos.
Sanciones
Si no respeta las leyes de seguridad de los asientos infantiles en Indiana, se le puede imponer una multa de $ 25 y también se le pueden asignar puntos de demérito a su licencia de conducir.
Las leyes están vigentes para garantizar que su hijo viaje de manera segura, por lo que tiene sentido obedecerlas y también evitar multas por infracciones.